Afición al arte
Los Sommier han demostrado en cada generación su afición al arte. La decoración conservada en el hotel constituye el testimonio más antiguo de dicha afición y la reconstitución por parte de Alfred Sommier del mobiliario y la decoración interior y exterior de Vaux-le-Vicomte, su ilustración más evidente. Al visitar el Museo del Louvre, encontrará igualmente diversos ejemplos de esta pasión artística gracias a la filantropía de algunos miembros de la familia:
Un cuadro de Chardin que representan a “El Joven dibujante” (ala Sully, 2.ª planta) y una escultura del rey Carlos XII de Suecia de Bouchardon (ala Denon, planta baja), donados por Edme Sommier (hijo de Alfred) y su esposa Germaine Casimir Périer.
Dos cuadros de Giandomenico Tiepolo que representa al “El Charlatán” y “El Minué” (ala Denon, 1.ª planta) legados por Robert Le Roux, hijo de Anne Sommier, hermana de Alfred.
